PIEL DE MANZANA.
Vegetal por fuera. Con carácter por dentro.
En Camaléa no usamos piel animal.
Elegimos pieles vegetales que respetan tu estilo,
tu ética y tu impacto.
Cada colección nace de un material bio-based distinto; la primera, del universo de la manzana.
Un bolso modular, vegetal y esencial. Sin culpa, sin sermón.
QUÉ ES LA PIEL DE MANZANA PARA CAMALÉA
No hace falta saber todos los detalles técnicos. Quédate con esto: trabajamos con un material a base de fibra de manzana, diseñado para comportarse como una piel de alta calidad. Suave al tacto, resistente en el día a día, con el mismo nivel de detalle que esperarías de un bolso de lujo.
La manzana deja de ser solo fruta. Se convierte en tentación que puedes llevar al hombro.
COLECCIONES QUE CAMBIAN DE PIEL,
PERO NO DE ESENCIA.
Hoy: manzana. Mañana: otro origen vegetal.
Cada colección Camaléa explora una piel vegetal diferente, con su propia paleta, su propio carácter y su propio Edén. Lo que no cambia nunca es la base: modularidad, diseño consciente y piezas pensadas para durar.
Una base. Mil fases. Cero culpa.
CÓMO SE SIENTE. CÓMO SE CUIDA.
La piel de manzana de Camaléa es:
- Suave, con cuerpo suficiente para mantener la forma.
- Resistente, para acompañarte muchos ciclos de “hoy asa corta, mañana lo que quieras”.
- Vegetal, sin renunciar a un acabado elegante.
Para cuidarla, solo hace falta sentido común: evita guardarla aplastada mucho tiempo, límpiala con un paño ligeramente húmedo, sin productos agresivos y guárdala en su bolsa de tela cuando no la uses.

